Todos en algún momento necesitamos a alguien que nos de feedback, alguien que nos pueda ver con perspectiva y nos regale una opinión objetiva, sin juicio. Solo así mejoramos.
Sobre todo en un mes como este, donde todo comienza otra vez y hay que renovar ese compromiso y propósito con lo que haces para que te resulte fácil la vuelta al trabajo.
Este feedback puede ser muy útil en muchas circunstancias.
Por ejemplo, cuando lideramos a un equipo de personas y queremos saber si realmente les estamos transmitiendo los objetivos de manera clara.
También cuando damos una charla y cualquier comentario constructivo del público nos puede ayudar a mejorar muchísimo. Así la próxima vez no tendremos tantos miedos al hablar en público y confiaremos más en nosotros.
O cuando lanzamos un nuevo servicio en nuestra empresa y nos vendría de perlas saber si nuestro cliente recomendaría ese servicio a alguien.
Mi nuevo curso online del Método E.S.C.E.N.A tiene una modalidad con dos asesorías personalizadas para que te de feedback específico de ese discurso, sesión o vídeo que tienes que preparar.
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y comunica «a lo grande»
